Imágen sacada del blog 10milmillones.nireblog.com/Acabo de escuchar en una calle de este mi odiado barrio madrileño de Salamanca una frase escupida por un tipo cincuentón, bien arreglado, que comentaba con otro matrimonio de su edad algo de una vivienda "con bicho", pronunciando lo del bicho con desprecio, como si fuera una molestia. ("Bicho" se denomina al inquilino molesto de una vivienda en alquiler de renta antigua, al que se le suele acosar para que desaloje la vivienda lo antes posible para así poder especular con ella a precios del mercado libre). No sabéis como odio a esta gente prepotente, propietarios y caseros mezquinos y miserables a los que sólo les preocupa el dinero y la rentabilidad, el hacer negocios a costa de la vida humana. Son sólo la punta más modesta de un sistema-rodillo que aplasta al ser humano en España y en la mayor parte del Occidente capitalista. Su hambre de dinero me produce asco y me hace despreciar sus inútiles existencias hasta desear aplastarles y librar al mundo de estas pesadillas andantes. Hay terrorismos urbanos bastante justificados, uno de ellos sería destrozarles y okuparles sus benditas propiedades privadas. Pero ay, las fuerzas de seguridad del estado defienden la sacrosanta propiedad privada, piedra angular de nuestra sociedad. Nadie se libra de ser víctima de este rodillo sangriento.
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