¿LUCHAR CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO?


Recuerdo que ayer estuve hablando con mi suegro sobre como las empresas instaladoras de paneles solares estaban arrasando mucho terreno de la Mancha para producir energía que no aprovecharán más de 10.000 habitantes. Vi con mis propios ojos como habían aplanado una superficie como de 5 campos de fútbol, en medio de colinas, y muy cerca de una refinería de combustible, una central térmica y otra de ciclo combinado. Me pareció bastante absurdo que los paneles solares no fueran una alternativa real a las otras centrales de producción de energía contaminante, sino un pobre complemento.
Más tarde, hablando con un joven empresario de la provincia que tiene un terreno con placas solares para venderle la energía a iberdrola, éste me confesó que la mayoría de la gente que las instala es para recibir las subvenciones europeas y de la comunidad autónoma, e incluso me comentó una buena oportunidad de negocio con este tipo de energía en Rumanía. Me dijo que las subvenciones eran muy rentables y podían enriquecer a cualquier empresario avispado. Me pareció triste toda esa red de intereses tan antiecologistas.
Rememoré la charla con mi suegro en la que defendía el uso de la energía nuclear, ya que a pesar de los resíduos radioactivos y sus lobbies de presión, era la más productiva, rentable y hasta cierto punto, no contaminante para el cambio climático, aunque sí a largo plazo para el planeta. La conclusión que saqué fue que no hay remedio, y que si queremos seguir con este nivel de desarrollo y esquilmamiento, la única manera de no cargarnos más el planeta es con la energía nuclear, pobre alternativa para la humanidad y con muy mala prensa, TABÚ PARA EL MOVIMIENTO ECOLOGISTA MUNDIAL. La única manera de que se contamine menos es volver a la edad media, y yo pregunto : - ¿Quién va a ser el primero en bajar su nivel de vida, en despilfarrar menos, en consumir responsablemente?

Comentarios

Juan Eme ha dicho que…
El gran problema es que las subvenciones estatales alientan la picaresca y la corrupción. Otro problema es que la instalación de placas solares, al igual que los molinos de energía eólica, estropean el paisaje y arrasan montes y bosques para la poca energía que producen. Y el mayor de los problemas, que la alternativa nuclear, siendo el menor de los males, es peligrosa. Como no sea la fisión nuclear en frío, yo no veo salidas. La vuelta a una era pre-industrial, pero no somos amish.
KOSTOBLOGOF ha dicho que…
La energía nuclear es barata y viable, sí... Sobre todo si no vives en el área de Chernobyl, comiendo vegetales contaminados, envenenando tus tejidos, pudriendo tu genoma. Vivimos presos de algunas ilusiones. Una de ellas es la del crecimiento económico continuo. También estamos haciendo el experimento de a ver cuántos miles de millones de humanos cabemos en el planeta al mismo tiempo. Y estamos borrachos y vamos cada vez más deprisa, en una espiral estúpida de consumo. No se trata de vivir como los Amish. Pero la alternativa a los Amish no es nuestra cultura consumisto-capitalista-telebasurera. Si queremos sobrevivir, tendremos que cambiar nuestro sistema económico, nuestro sistema de producción, distribución y consumo, nuestra relación con nuestro habitat, nuestra relación con nosotros mismos. Otra cosa que podemos hacer, y que creo que es la inevitable, es seguir adelante, con los ojos tapados y más, más deprisa. Al final de esa carrera hay un hostión. Y si salimos de ese hostión, creo que podremos considerarnos felices si nuestros descendientes viven tan bien como los Amish.
Juan Eme ha dicho que…
estoy totalmente de acuerdo, pero me gustaría que me propusieran alternativas de vida, que hubiera realmente una voluntad política y social de cambiarnos a nosotros mismos, porque la teoría la sabemos, pero, ¿cuándo la práctica?. hay gente que vive sabiendo, en su nihilismo, que vamos hacia un final apocalíptico, y creo que incluso lo desea. yo a veces lo deseo, como creen muchos evangélicos que es el final merecido por la humanidad, algo bíblico. otra ilusión, claro, otra solución alternativa. es que no creo que ni yo, apagando la luz, ni consumiendo menos agua, sirva de mucho. me sirve a mí y a mi conciencia, y así lo hago. pero mientras siga el egoísmo de los gobiernos, las corporaciones y nosotros mismos, por mí, que esto reviente.