Da pena y risa (si no fuera el tema tan dramático) el afán y el desgarro con el que aún muchos partidos de izquierda se agarran a sus grandes clásicos : la Cuba de Castro, el bolivarismo autoritario de Chávez, el anti-imperialismo yanqui. No me gusta ver de visita vip a Cayo Lara, líder de Izquierda Unida, por el "paraíso socialista" cubano, ni me gusta contemplar la tibieza del gobierno de Zapatero con respecto a esta isla caribeña y su soporte venezolano. Cuando dirigentes de IU manifiestan su desagrado por las críticas al régimen castrista, enarbolando la injusticia de que no se critique de igual manera los desmanes de EEUU en Guantánamo (se ha hecho, amigos, se ha hecho), pienso que se obcecan en la pataleta gratuita. Parece que no quieren despojarse de unos rasgos de identidad antiguos, que los distinguen quizá de la socialdemocracia descafeinada y cada vez más liberal del PSOE, y siguen defendiendo modelos caducos y dictatoriales que han entrado en decadencia y que sólo hacen tiempo antes de llegar a la estación final.
Sí, sé que es el derrumbe de los clásicos de la izquierda. Otro más que no había citado : la comprensión con el batasunismo, englobado en eso tan recurrente de la libertad de los pueblos. Se puede criticar muy mucho la actual Ley de Partidos y decir que vulnera la libertad de expresión entre otras cosas, pero no que me lo diga alguien que no permite la libertad de expresión de los no nacionalistas y no independentistas, y que pone por encima sus derechos humanos al derecho a la vida de los que no piensan como ellos.
No voy a sustituir los herrumbrosos y agonizantes clásicos de la izquierda por los clásicos de la derecha, igual grima me dan los amantes del populismo neocon y los liberales de nuevo cuño, oportunistas y arribistas del mercado libre en su mayoría. Ya no quiero dogmas ni radicalismos.
No quiero Fideles ni Berlusconis ni Sarkozys ni Aznares, nisiquiera Obamas. ZP se desinfla por momentos y no se divisan líderes de recambio en el horizonte, por ahora..
Comentarios
Por si no lo habías leído, te cuelgo la reproducción del artículo de Azúa de hace unos días, que terminaba con esta frase:
"Y mira que sería sencillo que la izquierda recuperara su capacidad para armar las conciencias, inspirar entusiasmo y ofrecer esperanza en una vida más digna que su actual caricatura. Bastaría con decir la verdad y enfrentarse a las consecuencias. ¡Ah, pero son relativistas culturales! Y por lo tanto para ellos la verdad es un efecto mediático."
http://www.correo-ciudadano.net/2010/02/20/sobre-la-caricatura-de-la-izquierda-felix-de-azua-a-favor-de-la-memoria-historica/