Puro Trámite, Ninguna Lucha Obrera

Paseando por la calle Alcalá de Madrid, me he topado con una concentración de la CNT frente al edificio de la librería Blanquerna, que es también la delegación de la Generalitat de Catalunya, donde este sindicato protestaba por las malas condiciones laborales de los Trabajadores del Tansporte Público de Barcelona. Últimamente se suceden las manifestaciones y concentraciones de trabajadores de distintos sectores públicos y privados, que llaman la atención porque todos reclaman lo mismo, mejoras de los convenios, subidas de sueldos, congelados desde no se sabe cuándo.., etc..
Desde hace tiempo, no se ve mucha presencia de las grandes plataformas sindicales, parece que por estar en el poder un partido supuestamente de izquierdas, y cercano a estas plataformas, no hay problemas laborales, ni crísis económicas. Es un status quo falso y conformista. Debe ser que si la UGT y CCOO protestan por la mala situación de los trabajadores, puede pasar que den la imágen de que se alían con la oposición en la crítica al gobierno. Pero es que los sindicatos deben hacer su trabajo, independientemente de lo que parezca, no son partidos políticos aunque muchas veces den esa impresión. Los veo muy lejos del trabajador. Los contemplo tímidos, pasotas, agarrados a sus sillones casi funcionariales, recibiendo la subvención del estado, apareciendo sólo en la foto cuando hay que criticar la guerra de irak, a los obispos, etc.. Pero es que ese no es su lugar, su lugar es la lucha por la mejora laboral de sus representados. Sólo la CNT y la CGT hacen algo, son los más combativos. Los que tienen menos representación y medios. Suele pasar.

Si os habéis dado cuenta, llevamos un tiempo en que la subcontratación y la precariedad de los contratos ha producido un descenso drástico en la calidad del servicio que se les da a los consumidores en todos los ámbitos. ¿Quién ha podido comunicar aceptablemente una queja o uan reclamación a una empresa de telecomunicaciones?. ¿No ha tenido que enfrentarse a un laberinto de departamentos y teleoperadores que no le han sabido resolver el problema?. ¿Quién no ha sufrido también un mal servicio en cualquier establecimiento hostelero?. ¿Quién no ha tenido que padecer la mala calidad asistencial y la saturación en los servicios sanitarios públicos?. ¿Y la falta de guarderías, y la mala calidad de la educación secundaria?.
Entre la deslocalización y la gran rotación de muchos puestos de trabajo precarios, y la mala financiación de los servicios públicos, nos encontramos con una visible decadencia del estado del bienestar español, si es que alguna vez lo hubo de verdad.
Este gobierno no ha hecho nada con respecto a esto, al igual que tampoco lo haría un gobierno del PP. Los sindicatos siguen viviendo bien y no se les oye dar su opinión sobre el escándalo de la falta de vivienda pública y asequible, sobre los accidentes laborales. Y si dicen algo a nivel local o regional, parece que no quieren o no tienen poder para presionar, para hacer escuchar su voz. Parecen a veces, sindicatos verticales del movimiento, o cómo esos comités de empresa simbólicos y estáticos de las empresas, que son puro trámite. Es mi percepción personal, sé que no tengo toda la información de lo que pasa, pero duele esta falta de sangre en las venas, esta resignación ante las injusticias del sistema económico.

Comentarios

Juan Eme ha dicho que…
Creo que se lo leí decir a Paul Haggis, guionista de Ken Loach. Algo así como que en el Reino Unido, al igual que en España, los sindicatos no tienen ningún poder, a diferencia de Francia, Alemania, etc.. En España, como siempre, todo está atado y bien atado en nuestro sistema. Para no molestar a los empresarios y banqueros, pobrecitos.