Desde que los políticos y cargos públicos (sobretodo de la derecha) se creen que son como ejecutivos de empresas que han estudiado masters de economía neoliberal en la ESADE, han empezado a aplicar sin compasión y de forma despiadada recetas económicas que nos han sumido en el desastre y en el retroceso de la libertad, la igualdad y la democracia. Hasta que tengamos claro que nosotros nunca fuimos ni seremos sus jefes, no nos decidiremos a actuar de verdad. Si ni siquiera nos tratan como clientes, imagínate si alguna vez pudieron llegar a tratarnos como ciudadanos. Sirven a los lobbies y a las empresas que les pagan. Me contaron una vez que a un empresario vasco residente en Madrid, el PP fue a su casa a ofrecerle entrar en las listas electorales, sólo porque tenía dinero, prestigio y negocios solventes. Este empresario tuvo el buen juicio de no meterse en política. El caso Bárcenas demuestra lo entrelazado que está el mundo de la empresa con la financiación y la corrupción del PP. Yo te pago y tú me consigues contratos donde gobiernes. Así que deberíamos hacer colectas para pagarle a la Cospedal otro sueldo, ó a Rajoy ó a Montoro. Fontaneros, mecánicos, panaderos, mandad sobres con ese dinero negro que defraudáis, directamente a la sede central del PP, que os lo sabrá agradecer en el futuro. Y también id pensando en aquellos que "renueven" el PSOE, por si acaso.
Soborne usted a un alto cargo. Recuerdo también el caso Madrid Arena, donde se ve claramente el conchabeo entre empresas privadas y una institución pública (el Ayto. de Madrid), que con negligencia, no les hace cumplir las leyes. Claro, si les pagan las vacaciones a los cargos públicos, ó las copas en el Hipódromo y el putiferio. Unos se quedan con el dinero de los parados en Andalucía y otros comparten cama y lujos de alto standing. Los políticos del PP, y en general de otros partidos, forman parte de una élite clasista que de manera, a veces burda, y otras, sofisticada, se chupan las pollas (con perdón) entre ellos, haciéndose favores mutuos. Ahí el pueblo no puede entrar. En sus bodas de alto copete, cacerías, cócteles y reuniones de negocios en las sedes de empresas sanitarias privadas, tenemos la entrada vedada. Nos miran los zapatos y nos impiden acceder, porque llevamos chanclas ó zapatillas de deporte.
Soborne usted a un alto cargo. Recuerdo también el caso Madrid Arena, donde se ve claramente el conchabeo entre empresas privadas y una institución pública (el Ayto. de Madrid), que con negligencia, no les hace cumplir las leyes. Claro, si les pagan las vacaciones a los cargos públicos, ó las copas en el Hipódromo y el putiferio. Unos se quedan con el dinero de los parados en Andalucía y otros comparten cama y lujos de alto standing. Los políticos del PP, y en general de otros partidos, forman parte de una élite clasista que de manera, a veces burda, y otras, sofisticada, se chupan las pollas (con perdón) entre ellos, haciéndose favores mutuos. Ahí el pueblo no puede entrar. En sus bodas de alto copete, cacerías, cócteles y reuniones de negocios en las sedes de empresas sanitarias privadas, tenemos la entrada vedada. Nos miran los zapatos y nos impiden acceder, porque llevamos chanclas ó zapatillas de deporte.
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