Últimas reflexiones del 2014

1. Generalmente, suelen ser condecoradas las personas más terribles y odiosas de un país. Espero que el Gobierno le haya dado una medalla a Esperanza Aguirre como reconocimiento y DESPEDIDA oficial de la política activa. O sea, que no la presenten como candidata a la Alcaldía de Madrid. Por favor, Señor, que sea así..

2. A ver, podemistas, socialdemócratas y ecosocialistas, a ver si os enteráis de que nunca hemos tenido el mejor sistema sanitario público del mundo hasta que llegó el PP y empezó a recortar y privatizarlo. Antes de que gobernasen los populares, que obviamente se lo están cargando aún más, este endiosado sistema de seguridad social ya no cubría ni las 
gafas ni la atención dental. Y nunca cubrió los quiromasajes ni la acupuntura ni la 
osteopatía ni la medicina natural. ¿Os parece ese el mejor sistema sanitario del planeta?

3. Sí, muy graciosos los niños cocineros del concurso Masterchef Junior, pero no sé si os habéis dado cuenta de que ya estamos metiendo a los niños en una rueda de competitividad, rivalidad y búsqueda del éxito perniciosa. Una cosa es la ambición y el ansia de perfeccionamiento en gente adulta, que más o menos puede soportar la presión, y la gran mayoría de las veces acaba neurótica, y otra cosa es meter a los menores en ese infame sistema para el que no están preparados. Después nos salen pequeños monstruos psicópatas y nos asustamos. Nos llevamos las manos a la cabeza cuando aparecen casos de acoso escolar, palizas y maltrato psicológico en los colegios e institutos, cuando lo que hacen muchos chicos es repetir nuestro modelo de vida de manera torcida y desquiciada. No critico que se pueda enfocar la cocina como un juego y una afición muy creativa y práctica, pero sin sobrepasar la frontera del divertimento. No me extrañaría que cualquiera de estos minichefs sacara un libro, un programa de tv y cualquier producto de explotación consumista que genere beneficios económicos para intermediarios, y sobretodo, para sus padres.

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