Un fracaso del capitalismo, con todas sus crisis económicas continuadas, es el cierre de los pequeños y medianos negocios, que vertebran la vida de las localidades. Es un fracaso de este sistema, ver qué tanto local comercial vacío, que nunca fue ocupado por un negocio o que vio fracasar varias de aquellas oportunidades, sea reciclado en un bajo para vivienda particular. Cada vez hay más. No es que sea esto negativo en sí, pero señala dos tipos de fracaso : los pequeños negocios no suelen prosperar en estas condiciones de crisis, por los altos impuestos y poco incentivo de la emprendeduría, el cambio de hábito del consumo, la compra por internet, el low cost y que la gente tiene poca liquidez, y el segundo fracaso es la vivienda y su alto coste. Los dos sectores fracasados se ayudan mutuamente para parchear la situación de menesterosidad. Una ciudad o pueblo sin dinamismo comercial no es nada, es solo una zona residencial. Ese dinamismo no se puede ver solo en los centros comerciales en las afueras de las ciudades. La gente no se reúne en el Carrefour o en el Ikea para conocerse y charlar, aunque seguro que los hay. Las plazas, los carriles-bici, los parques, forman el mismo medio ambiente que la tienda de barrio. No me resigno a comprarlo todo en Amazon.
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